La pequeña ciudad de Igoumenitsa se encuentra en el noroeste de Grecia, a apenas unos kilómetros de la frontera con Albania y enfrente de la isla de Corfú. Situada en un lugar de gran belleza natural, en los últimos meses Igoumenitsa ha ocupado más de una vez las primeras páginas de los periódicos griegos. En ella se concentran centenares de personas procedentes de países asiáticos y africanos que, en busca de un futuro mejor y huyendo de la miseria y la guerra, lo arriesgan todo para llegar a Europa. Una Europa que les cierra las puertas y los deja vivir pudriéndose en condiciones infrahumanas. En Igoumenitsa, los inmigrantes sin papeles se concentran porque quieren subir, como sea, a uno de los barcos que desde el puerto de esta ciudad salen cada día para Italia. Mientras esperan su oportunidad, viven en chabolas, en los alrededores de esta pequeña población. No faltan las muestras de solidaridad, pero tampoco los ataques de grupúsculos fascistas. El último y más grave, hace un par de meses, cuando el propietario de una gasolinera, que después resultó ser simpatizante del grupo neonazi Xrisi Avgi, atacó a varios inmigrantes con un rifle y estuvo a punto de matarlos. Desde entonces, el ambiente que se respira en la ciudad es muy tenso. La presión contra los que deciden mostrar su solidaridad es muy fuerte. Un claro ejemplo, el de la única médica del centro de salud local que ha decidido ayudar sin reservas a los inmigrantes y que ha tenido que enfrentarse con el comportamiento racista de los otros médicos de dicho centro, a los que el juramento de Hipócrates parece importarles un comino.
Por todo eso, se convocó una manifestación a nivel nacional para el día 29 de enero, para solidarizarse con los inmigrantes y mostrar a los luchadores antifascistas y antirracistas de Igoumenitsa que no están solos. Acudieron, organizados, grupos de Atenas, Salónica, la cercana Ioannina y otras ciudades griegas. ¿Con qué se encontraron los alrededor de 500 manifestantes? Con una ciudad tomada por la policía. Pero no se rindieron y comenzaron la protesta. Recorrieron toda la ciudad, rodeados en todo momento por la policía, hasta llegar al campamento de los inmigrantes, algunos de los cuales se unieron a la marcha. Después, contentos por haber logrado el objetivo, volvieron a la ciudad. Pero un poco antes de llegar al final de la manifestación, la policía los atacó y mostró una vez más su papel represor. Hubo algunas detenciones, pero los manifestantes permanecieron en Igoumenitsa y con su presión consiguieron que pronto fueran liberados, sin ningún cargo.
Este es el relato de los compañeros:
"Hoy, 29 de enero, Igoumenitsa era una ciudad ocupada. Fuerzas policiales de todo tipo (antidisturbios, secretas y policía portuaria) llenaron las calles. La razón de esta ocupación era la convocatoria a nivel nacional de una manifestación de solidaridad con los inmigrantes, realizada a partir de una iniciativa de compañeros y compañeras de la ciudad.
Desde hace algún tiempo, Igoumenitsa se ha convertido en uno de los puntos centrales de la política antimigratoria del estado griego. Un lugar geográfico de importancia vital para esa Europa-fortaleza que estamos construyendo. Las persecuciones racistas, la exclusión, la xenofobia y el apartheid provocan que las fuerzas policiales y la policía portuaria descarguen sobre los inmigrantes "ilegales" y al mismo tiempo dejan el camino libre a los fascistas locales.
Desde el comienzo de la manifestación sufrimos la presión asfixiante y la actitud provocadora de las fuerzas represoras, que se habían desplegado en gran número para imponer el miedo entre la población local y evitar así que los manifestantes se acercaran al campamento donde residen los inmigrantes. Sin embargo, estos intentos de la "democracia" por imponer el silencio en la población local, especialmente después de los acontecimientos de los últimos meses (inmigrantes muertos y heridos por la policía y por las balas de un conocido fascista local), fracasaron.
La manifestación de hoy en solidaridad con los inmigrantes recorrió todas las calles céntricas de la ciudad y durante la misma se repartieron cientos de textos y se gritaron múltiples consignas. No fueron pocos los jóvenes y los inmigrantes que se sumaron a la marcha hasta llegar al campamento, donde vivimos emotivos momentos de solidaridad. Decenas de inmigrantes, al ver la manifestación, se acercaron con la intención de unirse a ella. Los antidisturbios evitaron que se aproximaran a la marcha, creando una barrera, y la tensión aumentó. Intervinieron los cordones de seguridad de la manifestación consiguiendo que algunos inmigrantes se sumaran a nosotros y continuamos la marcha dirigiéndonos hacia la pequeña Universidad local, donde terminaríamos. Pero un poco antes del final la policía nos atacó con gases lacrimógenos y con las porras. Nos persiguió hasta las instalaciones universitarias. Como resultado, nueve compañeros con diferentes heridas (dislocación del hombro, rotura de menisco, reacciones alérgicas en los ojos, golpes en la cabeza...) y siete detenidos, que fueron dejados en libertad sin cargos después de un par de horas."
Fotografías y vídeos podéis encontrar aquí:
http://athens.indymedia.org/front.php3?lang=el&article_id=1254372
http://www.youtube.com/watch?v=Sg_plTmYpJI&feature=player_embedded#
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Ελευθεριακή Συνδικαλιστική Ένωση - Διεθνείς Σχέσεις
Unión Sindical Libertaria - Relaciones Internacionales
http://athens.ese-gr.org/
lunes, 31 de enero de 2011
MANIFESTACIÓN EN SOLIDARIDAD CON LOS INMIGRANTES EN IGOUMENITSA (GRECIA)
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